Por: Nunwil Mujica @ibarran.21
Martin Hahn (@martinhahn_1), escritor, dramaturgo y profesor universitario venezolano estuvo presente en el 2° Seminario INNCO: conectados y Desconectados, donde dieron a conocer los resultados de distintas investigaciones con respecto al panorama digital y mediático en Venezuela.
Hahn también forma parte del Observatorio Iberoamericano de la Ficción Televisiva (Obitel), que es un red internacional que se estableció en el año 2005, formado por un grupo de investigadores de once países, quienes se encargan de elaborar el diagnóstico y percepción de la ficción televisiva.
El escritor de la telenovela venezolana titulada “La mujer de Judas”, inició la explicación con la frase que él indica fue muy frecuente durante las entrevistas que llevó a cabo: “en Venezuela no existe la televisión”. Adicionalmente, explicó que Obitel habla de Venezuela en el 20-21, capítulo 11, el cual tiene como título “Venezuela televisión en pausa” debido a que durante la pandemia, específicamente en Venezuela, hubo una congelación de la producción, razón suficiente para realizar una investigación.

“La postpandemia no sólo mermó la ficción en Venezuela, sino que también la eliminó en un 95%”, informó Martin Hahn. Adicionalmente, indica que la televisión abierta ha sido la opción más accesible en comparación con la plataforma de Streaming ya que es un poco costoso para adquirirlo aparte, en las regiones cada vez es más complicado debido a la mala calidad del internet.
Otra de las fuertes frases que obtuvo durante la investigación fue “mientras exista pobreza habrá televisión abierta”.
Hahn informó que actualmente hay 21 canales venezolanos de señal abierta que continúan activos (comunicación vertical), 19 canales regionales (comunicación vertical) y 21 canales comunitarios (comunicación horizontal). Entre los canales regionales y comunitarios, se encuentran seis que son fundaciones, “lo que significa que son subsidiados por el Estado” y el resto, se mantiene por la comunidad, la publicidad de la zona y a pesar de que no tienen “tecnología de punta”, funcionan para abarcar las necesidades de la comunidad en donde se ubican.
Percepción de la tv venezolana
Con respecto a las entrevistas semi-estructuradas que le realizaron a personas allegadas a la televisión, como vicepresidentes, actores, técnicos, directores de arte, director de fotografía, público receptor y periodistas, Martin Hahn, dio a conocer varias preguntas, una de ellas fue ¿cómo veían la televisión venezolana actual? Y ¿qué cambiaría de esa televisión?, obteniendo diferentes respuestas como “desde mi perspectiva, ahorita no hay televisión”, “no hay televisión en Venezuela”, “no se hace televisión en Venezuela”. El dramaturgo explicó que las personas respondieron de dicha forma ya que la televisión del país se encuentra en una circunstancia de pobreza.

Otra de las opiniones que otorgaron las personas entrevistadas fue, que “se hace un esfuerzo por transmitir contenido que no los ponga en riesgo, dada a la alta vigilancia emitida por CONATEL (Comisión Nacional de Telecomunicaciones). A pesar de lo mencionado anteriormente, la programación de señal abierta “está condicionada a una legislación que contrala la difusión de determinado contenido, temas e invitados.
Por otra razón, “enmudecen a determinados programas de opinión y otros por lo sobresalientes de exceso de los programas de opinión que poseen una línea editorial a fin del gobierno”. También expresaron que la situación de la televisión venezolano también se relaciona con el “control exagerado de CONATEL”, ya que los contenidos no pueden ser creativos ni novedosos porque no lo permiten.
En la muestra de la investigación también dieron opiniones con respecto a la inversión, donde opinaron que otra de las razones por la cual la televisión venezolana no existe es la falta de inversión.
La preocupante situación se ve reflejada en los canales de televisión abierta, donde están proyectando repeticiones de “producciones que se hicieron en Venezuela hace 20 años”. Adicionalmente, Hahn indicó que la mayoría de la población repudia la televisión venezolana comparándola con canales que pueden llegar a Venezuela, como los canales colombianos.
Vivir y Convivir
Martin Hahn habló sobre el proyecto Vivir y Convivir, el cual nace de la necesidad de transmitir un mensaje esperanzador con el fin de reconciliar a la población venezolana y eliminar la línea política. La producción se desarrolló a través de cortos, con una duración de 5-10 minutos con celulares, posteriormente se realizó la edición con un programa profesional, contando con el apoyo de estudiantes de arte, apoyando también con la cámara, el sonido, la postproducción del sonido, colorización, obteniendo como resultado un producto de calidad, tanto así que, si Netflix quisiera comprarlo, tendrían todo para que lo puedan adquirir.

Para finalizar indicó que la producción es complicada de “comercializar” porque son cortos de dicha longitud y además no es de “corte internacional” pese a que ciertos temas se pueden exportar, pero se toca el tema de la realidad venezolana. Ésta producción la puede conseguir en YouTube y seguirlos en Instagram como @viviryconvivirvenezuela.