Durante las Jornadas de Extensión realizadas en la Facultad de Humanidades y Educación, el coordinador de la Comisión de Apoyo al Estudiante con Discapacidad de la Escuela de Bibliotecología y Archivología (CAEDEBA), Miguel Mendoza, presentó su investigación.
El trabajo se titula “Discapacidad en la UCV”, y en el mismo se da conocer, a través de una línea de tiempo, los eventos importantes que han tenido estudiantes con discapacidad en la universidad.
Se habla de la historia de la discapacidad en el terreno educativo y de ¿cómo la UCV ve a las personas con discapacidad? Se trata de una investigación que realizó el docente con ciertas referencias bibliográficas y actores que tuvo la oportunidad de consultar.
“La idea es recordar la deuda que aún tiene pendiente la universidad con los estudiantes con discapacidad, mi investigación data de 1984 hasta el 2021″, señala.
Agrega que durante esos años se establecieron comisiones, unidades, fundaciones, asociaciones, cátedras, programas, centros, propuestas, elecciones, censos, políticas, asignaturas y asesorías. Sin embargo, muchas de estas iniciativas se perdieron, porque no hubo continuidad, por parte de las autoridades, facultades, personal docente y empleados”.

En la investigación el profesor Mendoza señala que en 1984 ingresa el primer estudiante a la Escuela de Sociología (que se tenga registro), de sexo femenino, con discapacidad visual o físico motora, a través de una evaluación que realiza la Escuela de Psicología, quién la acompaña en toda su carrera. Una vez egresada sigue sus estudios, realizando un doctorado en España en la Universidad de Salamanca.
Es a partir de ese ingreso que se empieza con todo un movimiento con el propósito de garantizar el ingreso del estudiante con discapacidad, desde el punto de vista socio cultural, orientación, apoyo, protección que garantizara su desarrollo integral y personal en la universidad, cursos y talleres para profesores y estudiantes, obstáculos arquitectónicos y la señalización, reglamentos, normativas y procedimientos, servicios comunitarios, etc.
“Para el 2003 se crea la Cátedra Libre de Discapacidad, muy importante porque fue una referencia para muchos lo que hemos estado relacionado con el tema de la discapacidad a nivel universitario, creado por el profesor Manuel Aramayo, fue aprobado por resolución del Consejo Universitario N° 267, con el propósito de promover la extensión, la docencia y la investigación; además de organizar jornadas de atención para los estudiantes con discapacidad, inclusive entrenarlos y formarlos en el uso de la tecnología”
Mendoza recordó en el 2003 se realizó un evento llamado «Red Social», para estudiantes con discapacidad visual, con alianzas de varias fundaciones y la Biblioteca Central con equipos braille y otros recursos.

“En el 2004 se forma de manera organizada la Comisión de Apoyo al Estudiante con Discapacidad de la Escuela de Bibliotecología y Archivología (CAEDEBA), se basó en discusiones y la preocupación de un grupo de personas. El objetivo era el apoyo académico al estudiante con discapacidad y la concientización; que inició con talleres para profesores y estudiantes en nuestra escuela, evento que se realiza en nuestra facultad por 7 años consecutivos”.
Asimismo Mendoza prosiguió con eventos de relevancia que visibilizaron a las personas con discapacidad.
“Para el 2012 la Facultad de odontología funda el Centro de Atención para Pacientes con Discapacidad, donde se ofrecía servicio de grupo dental a personas con discapacidad, se formaban odontólogos para atender a esos pacientes, en el 2020 se prestaba servicio en esta unidad, en este momento no se presta servicio por falta de recursos y la Unidad de Investigación y Capacidad Política y Social de FaCES, específicamente la Escuela de Trabajo Social, realizó trabajos de investigación, además se realiza el primer censo sobre discapacidad”.
De acuerdo a los resultados del censo, la Facultad de Humanidades y Educación era la que tenía la mayor cantidad de estudiantes con discapacidad, le seguía Ciencias, Ciencias Jurídicas y Políticas y FaCES. El menor número lo tenían Medicina y Odontología.
“En 2013 se aprueban las políticas para la inclusión de las personas con discapacidad en la UCV, también por CIUD, tenía que ver con inclusión, ingresos, servicio comunitario, pasantía, divulgación e investigación. No se mantienen porque no se aplican y preguntamos si conocen las políticas y nadie las conoce”.

Las tres miradas que se encuentran con el estudiante discapacitado
Durante el 2014 hasta el 2021 siguieron creándose programas, asociaciones, se contratan intérpretes del lenguaje de señas venezolanas (En la actualidad no cuenta con las personas), asignaturas en SADPRO (No se está impartiendo).
“A la fecha se espera respuesta de una reestructuración para la CIUD. Desde 1984 a 2021 vamos a encontrar 3 miradas, una donde se ve una silueta visible de la persona con discapacidad, que se entiende que tiene derechos y para poder participar en espacios como la UCV, necesita de la accesibilidad, no significa solo del espacio arquitectónico, se refiere a productos y servicios, si hablamos de inclusión estamos hablando de participación de aprendizaje”.
Mendoza con respecto a la segunda mirada desdibujada y casi borrada, explica que más o menos se ve al estudiante con discapacidad. “Esa presión que tiene las autoridades con respecto a la discapacidad producto de las leyes. Una presión externa que obliga a las autoridades a responder al tema de la discapacidad, no porque se entienda el valor del estudiante».
Por último el Coordinador de CAEDEBA, hace mención de la mirada invisible. Es aquella donde el estudiante simplemente esta, no se le brinda ningún tipo de apoyo, no es tomado en cuenta”.
Mendoza afirma que durante su investigación claramente se observa que se ha trabajado en el tema de la inclusión para las personas con discapacidad en la UCV.
“Debemos seguir hablando sobre discapacidad, seguir visibilizando. El trabajo con respecto a la discapacidad en la universidad no ha terminado, hay un largo camino por recorrer, tenemos una responsabilidad con nuestros estudiantes con discapacidad.» Acoto.



