La sustracción de la escultura de María Lionza de la Universidad Central de Venezuela (UCV), el pasado domingo 02/10/2022, pone en riesgo la autonomía universitaria y el respeto entre las instituciones.

El Director de Consejo de Preservación y Desarrollo de la UCV (COPRED) Pablo Molina, precisó que los hechos ocurrieron el domingo pasado (2 de octubre), fecha en la que aún la universidad se encontraba de vacaciones colectivas. Según indicó, la pieza fue sustraída con previa planificación.

“Para trasladar una escultura con esas dimensiones, se necesita la coordinación de personal especializado, grúas, gandolas, etc. Conocimos por medios no oficiales que fue trasladada para la Montaña de Sorte, ubicada en el estado Yaracuy”, señaló.

Molina explicó que la escultura de María Lionza no forma parte del listado de Patrimonio Mundial como integrante de lo que se denomina el Proyecto Síntesis de las Artes; sin embargo, el arquitecto señaló que es una obra que pertenece a la universidad, al igual que el mural de Zapata.

Para Molina, existen comunicaciones que reflejan las gestiones realizadas ante las autoridades competentes para la reinstalación de la pieza que fue restaurada en el año 2005, a su sitio original, ubicado en la isla central de la Autopista Francisco Fajardo, hoy denominada Cacique Guaicaipuro.

“Consta en nuestros expedientes las comunicaciones remitidas a distintas instituciones solicitando el traslado con la coparticipación y cooperación para hacer la reinstalación de la pieza. Las autoridades universitarias, a través de las distintas direcciones adscritas y con competencias como COPRED y Mantenimiento , siempre hemos tenido el interés de retirar la obra del galpón y devolverla a su lugar de origen como lo estableció el tribunal en su momento”.

No estaba a la intemperie

Tal como explicó el arquitecto Pablo Molina, la pieza se encontraba resguardada en un galpón de la Dirección de Mantenimiento, al lado de la Casona Ibarra, en un espacio que se adaptó para el tamaño de la escultura. En ese sentido, desmintió el señalamiento según el cual, la obra en cuestión presenta deterioro producto de estar a la intemperie.

“Las características de la pieza hacen que presente porosidades, oscurecimiento y humedades propias de toda pieza que está a la semi intemperie. Si hubiese estado en la intemperie, tendría más daños”, destacó.

De acuerdo con Molina, la forma cómo fue sustraída la pieza no se corresponde al procedimiento adecuado en esos casos. «La UCV es la propietaria de la escultura, lo que debían hacer era solicitar un permiso para su traslado», apuntó.

Resaltó en ese sentido, que “la Constitución Nacional consagra la autonomía universitaria, lo cual conlleva una serie de relaciones, co-relaciones y protocolos, en los cuales, si nosotros somos los propietarios de la pieza ellos deben solicitar su traslado».

En ese orden, «si iban a realizar un traslado, al menos debieron hacer una propuesta para discutir dónde se iba a ubicar. Hubiéramos llegado a un acuerdo, pero previas deliberaciones respetuosas de las instancias administrativas de la universidad».

No se evaluaron opciones

Para el arquitecto, entre las distintas opciones que pudieron haberse considerado, estaban las de las donación y la concesión. «Nuestra Consultoría Jurídica determinaría y el Consejo Universitario lo decidiría, pero siempre estábamos conscientes que esa pieza no debería estar en la UCV, de manera que hablar de «secuestro» de la pieza como han señalado es estrafalario”.

Por otra parte, el Director de COPRED, afirmó que no hubo ninguna solicitud ante el Rectorado de la UCV, el Consejo de Preservación y Desarrollo y las Direcciones de Mantenimiento y Seguridad, sobre cualquier tema involucrado con el traslado de la pieza escultórica, por parte de la Comisión Presidencial o el Instituto de Patrimonio Cultural (IPC).

Por su parte, el Director de Mantenimiento, Félix Bellorín, insistió de igual forma que no recibió ninguna comunicación oficial por parte de la Comisión Presidencial, por eso refiere que «todo fue premeditado».

Destacó que posterior al hecho, y aún sin saber con exactitud los pormenores, realizaron la denuncia ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) e hicieron las consultas correspondientes ante representantes de la comisión presidencial que coordina labores a lo interno del campus ucevista, quienes manifestaron desconocer responsabilidades y paradero de la obra sustraída.  

De acuerdo con el Director de Mantenimiento de la UCV, el proceso de traslado de la escultura no se manejó por los canales institucionales regulares.

En ese sentido, el Director de COPRED aclaró que existe una investigación en curso. «Funcionarios se trasladaron al galpón para recabar evidencias y determinar las responsabilidades».

Debate técnico

Por otra parte, Molina aclaró que sus observaciones como dependencias responsables de la preservación y el mantenimiento de las obras son de carácter netamente técnicas; por ello consideran que introducir en el debate aspectos de culto o de otra índole no es de sus competencias.

“Nosotros no entramos en ese debate, no es nuestra área de competencia. Nuestro accionar no es contra nadie sino apegados a la ley, a la autonomía universitaria y al respeto a la institucionalidad”.

Consejo Universitario respalda comunicado de COPRED

El Consejo Universitario de la UCV, durante su sesión ordinaria del pasado miércoles 05-10-2022, conoció los informes del Consejo de Preservación y Desarrollo (COPRED), la Dirección de Mantenimiento y la Dirección de Seguridad sobre los hechos conocidos el día lunes 03-10-2022, en el cual las referidas Direcciones reportaron a los organismos de la Universidad la sustracción de la estatua de “María Lionza” y su traslado a sitio desconocido.

Una vez escuchados los informes respectivos, así como las intervenciones de los miembros, este Cuerpo aprobó respaldar el Comunicado emitido por el Consejo de Preservación y Desarrollo (COPRED), Direcciones de Mantenimiento y Seguridad, y en este sentido, «rechazó las acciones que contravienen los principios consagrados en el artículo 109 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y el artículo 7 de la Ley de Universidades, por cuanto la estatua de “María Lionza” del escultor Alejandro Colina es propiedad de la Universidad Central de Venezuela, la cual se encontraba resguardada y en condiciones adecuadas dentro del campus universitario. Asimismo, este Cuerpo acordó continuar con las investigaciones del hecho ocurrido ante las instancias correspondientes».

LEA EL COMUNICADO DE COPRED